El ictus o más comúnmente conocido como infarto cerebral es una enfermedad cerebrovascular que se origina cuando un vaso sanguíneo que transporta sangre al cerebro se rompe o se tapona por un coágulo o partícula. Al no recibir suficiente oxígeno las células nerviosas dejan de funcionar.
Actualmente, en España, más de 100.000 personas sufren casos de ictus, lo que muestra la gravedad de esta enfermedad en la población. Es más común en personas de más de 60 años y sobre todo en hombres, aunque la tasa de mortalidad en mujeres que sufren un ictus es también alta.
En Memoriae somos psicólogos expertos en adultos mayores, por eso, hemos preparado este post donde queremos ayudarte a que conozcas más sobre esta grave enfermedad y la importante relación que tiene con el apoyo psicólogo.
¿Cuáles son los síntomas del ictus?
A pesar de que el ictus actúa con rapidez y no deja casi tiempo a que la persona que lo sufre note sus síntomas, en algunas ocasiones diferenciamos los siguientes síntomas:
- Dificultad para hablar o comprender.
- Dolor de cabeza agudo y sin causa aparente.
- Visión nublada o pequeña pérdida de vista.
- Pérdida de coordinación.
- Pérdida de fuerza en la mitad del cuerpo (cara, brazo y pierna del mismo lado).
- Sensación de hormigueo en partes del cuerpo.
Tipos de Ictus
Existen distintos dos tipos de ictus: El denominado isquémico y el hemorrágico.
- Ictus isquémico: este tipo representa casi el 85% de los casos, especialmente en las personas mayores. Se produce cuando una arteria queda obstruida por algún coágulo o trombo. Este último limita el flujo sanguíneo por lo que no llega la cantidad de oxígeno correspondiente al cerebro. Las consecuencias de este ictus pueden ser muy graves. Los síntomas son fáciles de identificar, ya que dejan a la persona afectada prácticamente incapacitada.
- Ictus hemorrágico: este tipo representa el 15% de los casos de ictus cerebrales. A pesar de que suele ser menos frecuente que se produzca, este tipo de ictus es la consecuencia de la rotura de un vaso sanguíneo en el cerebro, causando una hemorragia.
¿Cómo prevenir un ictus?
Para prevenir un ictus se recomienda sobre todo seguir unos hábitos de vida saludables, evitar sustancias nocivas como el tabaco, al alcohol y las drogas, alimentarse de forma adecuada y no caer en el sedentarismo.
Otros factores de riesgo relacionados con el padecimiento de un ictus son, por ejemplo, la hipertensión arterial, la acumulación de grasa en sangre y las enfermedades cardiacas.
Aunque en estos casos el factor psicológico poco tiene que ver a la hora de prevenir un ictus es cierto que la salud mental y la gestión del estrés o la ansiedad pueden ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares que, como decimos, podrían ser causa de un ictus.
¿Cómo podemos ayudarte desde Memoriae?
Tras sufrir un ictus el paciente suele presentar una serie de secuelas. Muchas de ellas pueden ser a nivel físico, como la pérdida en la fuerza muscular, trastornos visuales, incontinencia urinaria, perdida en el control del movimiento, pero también se pueden experimentar síntomas que afecten a la salud mental de los pacientes, como las alteraciones en el estado de ánimo o el deterioro cognitivo.
Tras pasar por la rehabilitación de un ictus es muy común presentar un estado de depresión e inestabilidad emocional difícil de gestionar, por eso, te recomendamos acudir a un psicólogo especializado en adultos mayores como lo somos en Memoriae.
Además, también es muy común que el paciente sufra pérdidas de memoria, o de atención y dificultades para organizar o planificar tareas concretas y requiera de apoyo psicológico para afrontar esta nueva realidad.
Es muy importante conocer cómo el adulto mayor percibe su realidad tras el ictus, su situación no solo actual sino también sus expectativas de futuro. Conocer sus emociones, sus sentimientos, sus preocupaciones y sus aspiraciones es necesario para poder adaptar el tratamiento cognitivo y funcional a sus necesidades, intereses y preferencias, así como realizar un apoyo y acompañamiento emocional que permita incrementar aspectos clave para el éxito de la intervención como son la actitud, la motivación y el grado de implicación.
Para más información sobre tipos de ictus, síntomas, y más, visita nuestra web. Para cualquier otra consulta puedes ponerte en contacto con nosotros, estaremos encantados de ayudarte en lo que necesites.
